Que por doler me duele hasta el aliento y por arder se están desintegrando mis alas, que la verborrea no cese y este frío consiga que teclee otras palabras y otros hechos y tal vez, y solo tal vez, acierte en el centro de la diana (que está en cualquier lugar menos en el centro) y logre poner aquí, en mi epitafio, en esta carta de amor, en mi mensaje de buenos días mi amor, buenos días, muérete, tal vez.
Ha dolido arrancarse este silencio de la lengua, ponerlo sobre la mesa y construir el muro de me has hecho daño por última vez. Ahora empieza mi batalla, esperemos que el número de bajas sea menor esta vez, esperemos que la paz se firme pronto.
Ha dolido arrancarse este silencio de la lengua, ponerlo sobre la mesa y construir el muro de me has hecho daño por última vez. Ahora empieza mi batalla, esperemos que el número de bajas sea menor esta vez, esperemos que la paz se firme pronto.

Al leerlo he sentido un fuerte nudo en la garganta, ha dolido, lo he sentido, y eso basta para darse cuenta de que algo te ha marcado.
ResponderEliminarun abrazo.